Sólo el 15.9 por ciento de los asesinatos de mujeres cometidos en Oaxaca en lo que va del año son investigados como feminicidios; es decir apenas 7 de 44 ejecuciones de enero a abril.
El seguimiento hemerográfico que realiza el Grupo de Estudios Sobre la Mujer Rosario Castellanos (GesMujer) detalla que mientras que en enero fueron ejecutadas 15 mujeres, 9 en febrero y 8 en marzo, el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), detalla que en dichos meses la Procuraduría General de Justicia del Estado abrió investigación como feminicidio en 4,2 y 1 caso respectivamente.
“Lo que siempre hemos demandado es que se haga una análisis desde el enfoque de género porque creemos que si bien hay alguna situación en la que no tenemos coincidencia en los criterios de la fiscalía, creemos que puede haber una intencionalidad de ocultar información para minimizar la problemática”, expuso Angélica Ayala presidenta del GesMujer.
La experta en materia de género indicó que hay una urgente necesidad de establecer una política de claridad para definir la gravedad del problema puesto que la opacidad se convierte en el principal obstáculo para transitar hacia la solución del problema.
En términos de asesinatos violentos en el estado no hay una variación a la baja a lo largo de lo que va de este sexenio, sin embargo en las cifras oficiales los feminicidios si han disminuido.
“Los asesinatos violentos siguen una misma tendencia pero la clasificación del feminicidio es lo único que ha disminuído por eso es que nos parece una falta de sensibilidad en no reconocer que existe un problema grave”, expuso.
Otro dato que es de llamar la atención y que debe de ser analizado, es que en 41 casos ocurridos en este años, el presunto responsable es alguien desconocido, sin embargo de manera anticipada descartan que se trate de un feminicidio. “Datos como estos nos hacen cuestionar la validez de los discursos oficiales”.
Angelica Ayala planteó que debe haber un análisis profundo del contexto en el cual se están cometiendo los asesinatos de mujeres, ya que recordó que, por ejemplo, al tratarse de suicidios se encontró que en algunos casos eran resultado de una violencia sistemática permanente hacia las mujeres.
“Debe de terminarse la resistencia al manejo de cifras oficiales porque ello nos va a permitir como sociedad y gobierno identificar la problemática y establecer mesas de trabajo que den resultados”, manifestó.